Un inmenso sollozo, convulsionó a la afición deportiva de la Ciudad. Esa pena inmensa se introdujo en los hogares, se coló en las oficinas, penetró en los cafés, clavando en la gente su ritmo de angustia.

Fué de carácter colectiva y rápidamente se extendió por todos los rincones, hasta anegar el alma de la ciudadanìa: A LAS 14 HS. DEL VIERNES 27 DE ABRIL DE 1923, SE EXTINGUÍA LA VIDA DE CONRADO BÜNSLI, considerado el más alto exponente del deporte bellvillense, de las dos primeras décadas del siglo 20, tenía 29 años.

Su condición de deportista, lo elevaba a la categoría de los elegidos. Junto a DEMETRIO GOMEZ, fueron los pioneros de moldear en la faz deportiva al CLUB A. Y B. BELL.- En días que la apatía y el escepticismo atrapaba a la juventud de aquellos años, su vocación sin reticencia a los deportes del momento, fútbol, ciclismo, atletismo, motociclismo lo contó como el paladín para implantarlo en su club y luego propagarlo por el resto del País.

Fué el punto de apoyo por demás eficaz e inspirador sin reticencias, de una obra deportiva que se perpetuó en el tiempo. Era distinto, pese a su carácter tímido y retraído, que sólo hallaba descarga en los deportes, por eso capitaneó cada representación del club, demostrando una pureza inmaculada, la sencillez a flor de piel, incapaz de alguna acción fuera del reglamento, para que EL y por ende, su institución fuese admirada y respetada.

La magnitud de la admiración de su figura, se patentizó en los homenajes recibidos: EL CLUB BELL DONÓ EL NICHO PARA GUARDAR SUS RESTOS EN EL CEMENTERIO "LA PIEDAD"-LA MUNICIPALIDAD OTORGÓ EL PERMISO DE VELARLO EN EL LOCAL SOCIAL DE LA INSTITUCIÓN HASTA EL DOMINGO 29 Y ENVIAR LA BANDA DE MÚSICA PARA LAS MARCHAS FÚNEBRES-UNA COMISIÓN DEL CLUB MANTUVO UNA GUARDIA ESPECIAL-.

El cortejo fúnebre partíó ese domingo 29, a las 10 horas, el ataúd se presentaba envuelto con la bandera del club, siendo impresionante la presencia de público de todos los estratos, para una verdadera exteriorización de sentimientos inédita en la Ciudad.

Instantes antes de depositarse los restos, en nombre del Club pronunció un brillante discurso FELIX GONZÁLEZ, haciédolo a continuación ROBERTO MATTERSON en nombre de los compañeros del fútbol.- Ocurrió hace 87 años y pese a la efímera vida terrenal, la misma fué demasiada importante, pesó mucho en el deporte bellvillense, por eso fué el pedestal de su grandeza.

FUENTE: Ensayo histórico del CLUB A. Y B. BELL de ALBERTO BüNSLI.